Podemos observar distintos procesos de alteración mineral:
Son procesos que sufren las rocas y minerales cuando, desde una situación de equilibrio, tienen que adaptarse a condiciones físico-químicas cambiantes para alcanzar un nuevo equilibrio. Este proceso puede desencadenarse por diversas circunstancias: físicas como son las alteraciones debidas a la presión y a la temperatura; químicas como, por ejemplo, la intrusión de fluidos meteóricos o hidrotermales; biológicas como, por ejemplo, la transformación de unos minerales en otros por la actividad biológica; y también las alteraciones debidas a una combinación de ellas. La adaptación mineral hacia nuevas situaciones de equilibrio implica la formación de nuevos minerales, es decir, un aumento de la complejidad mineral y, por tanto, nuevas etapas en la evolución mineral. La mina Pastora es un excelente ejemplo de algunos de estos procesos de alteración:
Pervasiva.- Se produce una alteración total de las rocas debido a la circulación de fluidos con sustitución de unos minerales por otros.
Argílica avanzada.- Se caracteriza por la destrucción total de feldespatos en condiciones de una fuerte hidrólisis generando sericita, caolinita, pirofilita y alunita.